En un plenario conjunto de las comisiones de Acción Social y Salud Pública, Familias, Niñez y Juventudes, y Presupuesto y Hacienda, la Cámara de Diputados avanzó con el dictamen del proyecto que declara la emergencia en la salud pública pediátrica y en las residencias médicas nacionales por un plazo de dos años. La reunión se realizó en cumplimiento con el emplazamiento votado en la sesión especial del pasado 2 de julio.
El objeto del proyecto también apunta, entre otras cuestiones, a garantizar el acceso efectivo, oportuno, equitativo y de calidad a los servicios de salud pediátrica, asegurar el funcionamiento adecuado de los hospitales públicos de atención pediátrica y proteger los derechos a la salud y a la vida de niños, niñas y adolescentes. La iniciativa surgió en respuesta a la grave situación que atraviesan hospitales pediátricos, en particular el hospital Garrahan, centro de referencia a nivel nacional.
El dictamen de mayoría alcanzó 65 firmas de 109 legisladores presentes. Además, hubo desde el oficialismo un dictamen de minoría de rechazo con 14 firmas, y otro de minoría con dos firmas.
El pasado 3 de junio, el proyecto de ley había logrado las firmas necesarias en la comisión de Acción Social y Salud Pública, que preside Pablo Yedlin (UxP). Luego, el 24 del mismo mes, se concretó lo mismo en la de Familias, Niñez y Juventudes, a cargo de Roxana Reyes (UCR).
El diputado Pablo Juliano (Democracia para Siempre) convocó a la unidad política en torno al sistema de salud infantil y advirtió que “la precarización de los residentes es otro golpe al Garrahan que no vamos a permitir”. Reclamó el apoyo de todos los gobernadores y destacó la labor del personal de salud como un orgullo nacional.
Por parte de La Libertad Avanza, Carolina Píparo cuestionó el emplazamiento forzado del dictamen y apuntó contra gobiernos anteriores: “Nadie se pregunta por qué un niño debe viajar miles de kilómetros para atenderse. Háganse cargo de lo que dejó el populismo”.
A su turno, Christian Castillo (Frente de Izquierda y de Trabajadores Unidad) denunció intentos del gobierno libertario por dividir a los trabajadores del hospital y señaló que el proyecto “responde a una necesidad real, asegurando que ningún residente gane por debajo de una canasta básica”.
Por parte de la UCR, Gabriela Brouwer De Koning enfatizó que la iniciativa no busca culpables ni controversias ideológicas, sino asumir responsabilidades frente a un sistema en crisis: “Cuando los derechos en salud están en riesgo, el Congreso debe actuar”, afirmó.
El diputado Esteban Paulón (Encuentro Federal) reconoció que la ley no resuelve los problemas estructurales del Garrahan, pero consideró que representa “una reparación simbólica frente al destrato hacia la tarea médica”.
Victoria Tolosa Paz (UxP) pidió disculpas por las demoras legislativas: “Me avergüenza ser parte de una comisión que buscó excusas para no firmar este dictamen. Le estamos dando la espalda al Garrahan y eso no se puede permitir”.